domingo, 24 de junio de 2018

CUANDO LA INSPIRACIÓN HACE HUELGA


La vida pasa y ocurren cosas… hay obligaciones,
desgracias, imprevistos; y al final, acabamos haciendo lo que podemos y no lo que queremos.

¿Conocéis a algún bloguer@ que suba posts en tiempo? Sinceramente, ninguno. A todos nos suena eso de “después de un tiempo sin publicar, quiero retomar este blog…” Y Es que la inspiración viene cuando le da la gana. Lo mismo nos tiramos una racha en modo “apalizando al personal” con nuestra inventiva, que nos la pasamos en dique seco preguntándonos qué hemos hecho para merecerlo. En fin, nada nuevo.


Hace poco me preguntaba un buen amigo: “¿es que has tenido un parón poético?”
 ¡¿Parón poético?! No tío, lo mío es un derrape con vuelco, la boca llena grava y mis musas vestidas de etiqueta, enterradas en barro hasta las rodillas. Claro que sí. Como el Coyote cuando palpaba el aire bajo sus pies sabiendo lo que le esperaba.
 Como el dandi con lamparones de Sabina. Como un imbécil vestido de Don Juan, deshojando margaritas sobre la cofa de un barco que se hunde sin remedio. Con lo bien que me quedarían unas buenas calzas pegaditas…

Pues sí, sequía, inopia, procrastinación. 

Pero no me he rendido, he pataleado, llorado, he preguntado a los más sabios del lugar sin encontrar remedio a este mal. Pero cuando llevaba seis días haciendo la postura de la grulla en un poste kilométrico de la N340 vi la luz.
Fue David Carradine, quien se me presentó frente ante mí vestido de jedi, con unas alpargatas de esparto gastadísimas. Y me dijo: “pequeño padawan, usa el poder de tu enemigo en tu favor.”

¿Me estás pidiendo que escupa en la cara de la mismísima inspiración? porque es más o menos lo que ella me hace a mí.

“No criatura, escribe sobre ella.”

Ah vale…

Y aquí estoy, contando mis peripecias. Después de esto, espero ser el Chuck Norris de la poesía ¡Qué digo Chuck! ¡El Bruce Lee de la lírica!
Tras esta experiencia tan enriquecedora, a la altura de los grandes iluminados, sólo espero que ésta pueda servir a los posibles lectores del blog para salir del famoso bloqueo del escritor, por un mayor bien para la escritura.


O no…


Eusebio Oria